Una pieza creada en honor a Santiago Giraldo, periodista cuya voz ha acompañado historias que mueven, revelan y transforman. Su oficio, construido sobre la verdad y la sensibilidad humana, inspira el espíritu de esta obra: la fuerza de iluminar caminos incluso en medio de la incertidumbre.
La Venus de Arles, símbolo eterno de belleza y renacimiento, encuentra en él una conexión profunda. En la pieza, el micrófono deja de ser herramienta y se convierte en emblema: representa el lugar donde su voz tomó sentido, el escenario que marcó su inicio y el puente que lo ha unido con tantas realidades. Aquí, arte y palabra se encuentran para honrar a un narrador que convirtió cada historia en un acto de propósito.
